Los Diarios Terribles.

Estaba un poco aprehensiva en leer el experimento (por así decirlo), de Oriana pero me topé con "Los Diarios Terribles" en uno de esos momentos (que últimamente me sobran) de no hacer nada. Y decidí leerlos.

Me alegro de haber leído... sobretodo por todo lo que me hizo sentir y hacer memoria el quinto capítulo. Por esto quise citar algunos párrafos que básicamente resumen mi adolescencia de 16 y que pasó cinco años después. Son párrafos aislados, por eso puede que no tenga mucho sentido para ti, pero para mí tiene todo el sentido del mundo.

"¿Qué te puedo decir de la fiesta? Ahí dentro se respiraba vida. Punzante y eléctrica, vida de adolescente, de esos que no tienen nada que perder y cualquier oportunidad se presta para ganar. No hay otro momento en la vida en que uno se sienta más invencible que siendo adolescente.
Estaba decepcionada de él, de que esa relación tan especial que teníamos se hubiese esfumado sin ninguna explicación. Tal vez más que decepcionada, estaba dolida. Quería decirle lo dolida que estaba, lo mucho que lo extrañaba, todo lo que deseaba que estuviera bien, pero no me salía ni una sola palabra de la boca.

Sí, sí debo hacerlo, porque te herí, porque puedo sentir desde aquí lo mal que te sientes, porque tu cara era otra muy distinta a la que yo conocía cuando te vi ese día. Te debo una explicación. No te hará sentir mejor.

Así que sea lo que sea que hagas a partir de ahora, siempre recuerda que fuiste alguien especial en mi vida, alguien que nadie más ha sido, y que contigo aprendí, me reí, y gracias a ti me sentí más viva que nunca.
Ese era el momento en que debía tomar una decisión, podía sentir que era en ese preciso instante o nunca más lo haría. Así que lo hice.

-        Cuando terminemos de hablar me voy a dar media vuelta y me iré. No quiero que me sigas, no quiero que digas mi nombre, no quiero que me hables en mucho tiempo, porque debo desprenderme de ti, y te exijo que me dejes hacerlo. Si me sigues, si dices mi nombre o si me hablas en los próximos días o semanas, no podré hacerlo. Te recordaré, y recordaré nuestro tiempo juntos, y querré vivir todo eso de nuevo. Será un círculo vicioso donde sé que saldré herida, y te pido por mi propio bien que no trates de acercarte a mí.

Son miles las personas especiales que pasan por nuestra vida, cumplen una función y luego se van, pero eso está bien, eso es lo correcto. No estamos destinados a pertenecer a una sola persona, ni nuestras vidas van a ser siempre como lo fueron con esas personas, vamos a crecer y vamos a avanzar, y eso es lo que debe pasar. Las mejores cosas deben tener un final, sino no hay manera de recordarlas como lo mejor que pasó, se perderían entre las cosas medianamente buenas y las malas."